Un estudio asegura que sobran 41.000 empleos en la banca

España tendría que cerrar 10 oficinas bancarias al día durante tres años para dejar la red en un tamaño considerado "adecuado" o "racional", esto es, que oscile entre las 25.000 y 30.000 oficinas, según el estudio ¿Tiene futuro la red de oficinas bancarias?, del Instituto de Estudios Bursátiles (IEB).

Este ejercicio también supondría la eliminación de un excedente de 41.460 empleados en la plantilla, lo que representa el 16% del total, según consta en un comunicado de prensa.

El análisis indica que la reducción de la red bancaria en España tendría que ser del 35% con respecto al número de oficinas que había en enero de 2011, unas 41.000.

Sin embargo, aclara que el ajuste podría ser mayor en función de la crisis económica y del mapa definitivo que surja de la reestructuración bancaria que se lleva a cabo.

El IEB resalta que la reducción es un asunto de eficiencia del negocio bancario si se considera que, en la actualidad, el 30% de las oficinas genera el 70% del resultado global de las entidades, según datos del Banco de España.

Al respecto, el IEB expresó que "no tiene ningún sentido" que España siga siendo el primer país del mundo con más oficinas por habitante.

"Tampoco es lógico que seamos el cuarto país con más oficinas, cuando ni siquiera estamos entre las diez primeras potencias mundiales", resaltó.

En todo caso, alertó de que se debe tener cuidado para no provocar el llamado "efecto péndulo" o cerrar más oficinas de las necesarias, y reconoció que es muy difícil dar una cifra exacta de cuántas oficinas se cerrarán.

En este aspecto, citó que en los últimos 12 meses hay entidades que han cerrado más del 15% de su red y otras que apenas han llegado al 2%.

Asímismo, el estudio del IEB adelanta que la reforma financiera tendrá como resultado que haya sólo una decena de grandes entidades, "algo que no resulta descabellado si tenemos en cuenta que en España los 7 mayores bancos tienen sólo una cuota de mercado del 40%, cuando en Europa la media es del 70%".

Como ejemplo de esta situación, recordó que el Santander llegó a tener una cuota de mercado superior al 20% cuando se fusionó con el Central-Hispano y que ahora apenas llega al 13%, lo que supone que, para llegar a tener de nuevo esa cuota tendría que adquirir un banco del tamaño del Popular (con un 7% de cuota).

La otra burbuja