La muerte del padastro de Fiona Ferrer

«Pienso honrar el nombre de Dieter Frerichs, a quien no
me gusta llamar padrastro sino padre, puesto que llevaba con mi madre
desde que yo tenía 6 años. Después de lo que he vivido no pienso
permitir que se digan mentiras. Lo primero que quiero aclarar es que mi
padre no era el propietario del fondo financiero que se investiga
judicialmente en Alemania por un caso de estafa, sino el delegado en
España. Lo segundo, que no era un huido de la justicia dado que después
de estar detenido en la cárcel de Mallorca el pasado 13 de abril, tenía
orden de personarse todos los días 1 y 15 de cada mes, como sí hizo el
pasado 1 de julio; y tercero, que siempre colaboró con la Justicia
informando de todo lo que le pidieron».




La estilista y presentadora, Fiona Ferrer



Quien así habla es Fiona Ferrer, la estilista y
presentadora del programa «Fiona, te necesito», que el pasado sábado fue
testigo de la muerte de su padrastro en una secuencia de imágenes que
jamás olvidará. «Dieter estaba tratado médicamente, puesto que padecía
depresión y sufría claustrofobia desde los años de la guerra alemana
cuando estuvo encerrado en un búnker. Fue por estos motivos de salud por
los que enviamos dos informes médicos a la Audiencia Nacional para que
prestara declaración desde Mallorca (el caso se dirime en Alemania donde
permanece en prisión el propietario de estos fondos desde el pasado mes
de octubre) con el fin de que no se separara de su familia.
Serían las once de la mañana cuando les dije a mis padres
que salía a comprar la prensa. A mi vuelta vi por la ventana a Dieter
en su silla leyendo y mi madre en otra zona tomando el sol. De pronto oí
unos gritos e insultos. Por las rocas había un chico y dos más cerca
gritando. En ese momento pensé que eran atracadores. Cuando busqué a
Dieter ya estaba en el agua y para eso tenía que haber saltado los siete
metros que tiene el barranco. Le grité y me contestó: “¡Llama a la
policía!”. El chico estaba por las rocas y le estaba señalando. No vi
más. Luego oí dos disparos y al mirar Dieter estaba envuelto en un baño
de sangre. Estaba histérica gritando sin parar. Cogí el vídeo y grabé lo
que pude, la sangre, los chicos intentando reanimar a Dieter; no podía
imaginar que eran policías. Les gritaba: “Asesinos, hay que llamar a la
Policía”, y ellos me decían que me callara. Mi madre estaba horrorizada,
no la dejaban acercarse. Hoy estamos las dos destrozadas», añade.
Fiona Ferrer desconoce si Dieter tenía un arma, pero me
aclara que no tenía permiso. No entiende por qué sucedieron las cosas de
esa manera. «La policía nos ha dicho que Dieter tenía que estar a las
cuatro de la tarde ante la Juez, pero ¿por qué no llamaron a la puerta?
Mi padre no estaba huido, se había personado el jueves anterior, tenía
que operarse el 16 de agosto de la rodilla, no quiero inculpar a nadie
pero hay que ponerse en mi situación, nunca pensé que la Policía actuara
así. Han registrado la casa y no han encontrado nada, pero ayer
apareció el arma en el mar. Ahora hay que esperar a las pruebas de
balística. Todavía no nos han llamado para el reconocimiento del
cadáver», cuenta Ferrer quien hace un año contrajo matrimonio con Jaime
de Polanco, en la que se consideró la boda del año por la cantidad de
invitados famosos.

“Dieter Frerichs no era ni prófugo ni defraudador. Y voy a
hacer todo lo que este en mi mano para limpiar el nombre de mi segundo
padre, al que han tratado como un perro. La actuación de la Policía ha
sido peor que el trato a cualquier terrorista. Dieter llevaba treinta
años viviendo en España y sabían perfectamente como localizarle. El
pasado 1 de julio estuvo firmando en el juzgado de aquí de Palma, en la
Avenida de los alemanes, como hacía cada primero y cada quince de mes. Y
el próximo 17 le iban a operar de la rodilla”, comenta Fiona Ferrer Leoni a Vanitatis, tras la muerte de su padrastro en un intento de detención que habría tenido lugar el sábado en Mallorca.
“¿Qué
es ésto de decir que estaba en busca y captura porque no se sabía dónde
vivía? ¿Cómo la policía entra por la zona de las rocas que da a mi casa
en vez de llamar a la puerta y preguntar por él? ¿Cómo no se
identifican antes? Es desolador lo que han hecho con él”. Con palabras
entrecortadas por el llanto, Fiona Ferrer contaba la dramática e
incomprensible situación que ha rodeado la muerte de Dieter Frerichs, pareja sentimental de su madre, Mietta Leoni, desde que Fiona tenía seis años.
Su
versión difiere totalmente de la dada por la Policía. Además, parte de
la secuencia la grabó al ver lo que estaba ocurriendo. “Te juro que yo
oí dos disparos, pero no vi a Dieter empuñando ninguna pistola. Sólo
escuchaba cómo me gritaba desde las rocas: ‘Llama a la Policía, llama a
la Policía’”, lo que le hizo pensar que se trataba de ladrones o
elementos violentos que agredían a Dieter.
La pareja sentimental
de Mietta Leoni se encontraba inmersa en un proceso judicial por una
supuesta estafa millonaria, pero no había sido juzgado y tampoco
procesado. La Audiencia Nacional había rechazado los informes
médicos presentados por su abogado para poder declarar en España y no
tener que viajar a Alemania.
A sus 73 años, padecía una serie de
lesiones en las piernas de las que iba a ser intervenido en Palma y, por
lo tanto, como repite Fiona: “Si len hubieran querido detener, deberían
saber su domicilio, que es el de siempre. Haber llamado a la puerta y
detenerle. Ahora está muerto”.
Según la información publicada por
varios medios, el pasado 13 de abril, ingresó en la prisión del Palma,
de la que salió tiempo después. “No estaba imputado ni huido, ni había
ningún juicio”, explica Fiona, negando lo publicado hasta ahora. “Dieter
era director de un fondo financiero muy importante de Alemania, cuyo
dueño sí está en prisión. Todo ocurrió muy rápido”, asegura.
Según
recuerda la presentadora de televisión: “Mi madre y Dieter estaban
tomando el sol. Yo leía el periódico y de pronto escuche gritos y vi a
unos chicos jóvenes (los policías de paisano), pero no a Dieter. Mi
madre estaba en estado de shock y no le dejaron subir a casa ni
acercarse. Y yo sin entender lo que ocurría. Veía a Dieter levantando la
mano y repitiendo: "Call the Police". Y después, dos disparos. De
pronto, apareció una lancha de salvamento que se lo llevó. Un horror. Ha
sido espantoso y todo esto lo he contado en el juzgado”, asegura.
A
tenor del relato de Ferrer, “aún no se ha encontrado el arma. Hoy (por
ayer), se ha desplazado un cuerpo especial de la policía con unos
aparatos que detectan cualquier trozo de metal. He dicho lo que he visto
y vivido, y repito: sólo quiero que no se empañe la imagen de Dieter”.
El
suceso ha conmovido a los vecinos y a la gente de la isla que conocía a
Frerichs desde hace treinta años. Ahora será la justicia y la
investigación judicial los que aclaren la dramática muerte. Fiona,
casada con el empresario Jaime Polanco, sobrino del que fuera
fundador y dueño de Prisa, se encontraba de vacaciones en la casa
familiar tras haber grabado varios programas de su espacio televisivo
‘Fiona, te necesito’.